Billin: programa de facturas con valoración de 4,7 sobre 5 en Google. Accede con el cupón GLOSARIO y disfruta de 2 meses gratis
glosario contable>Accionista

¿Qué es accionista?

Según la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), un accionista es la persona física o jurídica que tiene acciones de una sociedad, por lo que es propietaria de la misma.

Una acción representa una parte proporcional del capital social de la empresa, por eso, tener una acción (o varias) de una empresa te convierte en copropietario junto con los otros accionistas. Pero también te va a otorgar unos ciertos derechos y obligaciones que van a determinar tu vida y actividad dentro de la sociedad.

Por último, para tener accionistas no es necesario que la empresa o sociedad esté cotizando en la bolsa de valores. Es más, la mayoría de las empresas existentes con accionistas no cotizan, debido a los estrictos requisitos económicos y financieros que deben cumplirse para salir a bolsa. 

¿Qué tipos de accionistas existen?

Los accionistas son piezas clave en la vida de una empresa, ya que con su aportación de capital hacen posible su funcionamiento, expansión o supervivencia. 

Existen diferentes formas de clasificar a los accionistas, en función de su implicación en la empresa, del tipo de acciones que posean o del contexto en el que participan. 

Las formas de clasificar a los accionistas más comunes son:

  • Por grado de implicación en la empresa:
    • Accionistas activos: son los que participan directamente en la gestión, el control o las decisiones de la empresa. Suelen estar presentes en juntas e, incluso, ocupar cargos dentro de los órganos de gobierno.
    • Accionistas pasivos: los que se limitan a aportar capital con el objetivo de obtener beneficios (dividendos o plusvalías) sin involucrarse en la gestión. Suelen ser aquellos que invierten en empresas cotizadas en bolsa y que dejan que “sean otros los que manden”.
  • Según el tipo de participación:
    • Accionistas mayoritarios: poseen un gran porcentaje (o al menos significativo) del capital social, lo que les permite tener una influencia decisiva en las decisiones de la empresa.
    • Accionistas minoritarios: son los pequeños accionistas, los que tienen una participación reducida y, por lo tanto, menor poder de decisión, aunque mantienen sus derechos fundamentales.
  • Según el tipo de acciones que poseen:
    • Accionistas con acciones ordinarias: tienen derecho a voto y a participar en los beneficios.
    • Accionistas con acciones preferentes: estos accionistas pueden tener prioridad en el cobro de dividendos o liquidaciones, pero a veces sin derecho a voto.
  • Según el entorno de inversión:
    • Accionistas en empresas cotizadas: generalmente son inversores pasivos, ya que compran acciones a través de mercados bursátiles.
    • Accionistas en empresas no cotizadas: este tipo de accionistas sí que suelen tener un vínculo más cercano con la empresa, como en el caso de pymes o startups, e incluso pueden ser activos en la gestión.

De todas formas, estas categorías no son excluyentes, es decir, que un mismo accionista puede estar en varias al mismo tiempo.  

Por ejemplo, un accionista puede ser:

  • Minoritario porque tiene pocas acciones.
  • Pasivo porque las ha comprado en el mercado bursátil y/o con intermediarios.
  • Con acciones preferentes que le permiten comprar antes que otros accionistas.

¿Cuáles son los derechos y obligaciones del accionista?

Ser accionista de una empresa no es solo tener el derecho a cobrar dividendos. También implica formar parte de su estructura de propiedad, asumir una posición dentro del capital social e, incluso, influir en su rumbo y decisiones estratégicas, según el tipo de socio.

El accionista, además, mantiene una relación a medio o largo plazo con la empresa y forma parte de la evolución de la misma: 

  • Desde el punto de vista económico por la aportación de capital.
  • Desde la perspectiva del control, la toma de decisiones y la asunción de riesgos, que ejerce con su voto en junta de accionistas y/o su actuación si es parte de la administración.

Con lo que, si la empresa crece, el accionista se beneficia; si va mal, también puede perder parte o todo lo invertido.

Derechos del accionista

Dentro de la Ley de Sociedades de Capital (art. 93 y ss) están especificados cuáles son los derechos que tienen los accionistas dentro de la empresa. 

Estos derechos otorgan voz, control y acceso a los beneficios de la empresa a los accionistas. 

Los derechos que tienen los accionistas pueden ser económicos o de gestión:

  • Derechos económicos.
    • Recibir dividendos, si la sociedad decide repartir beneficios.
    • Vender o transmitir libremente las acciones, salvo que en los estatutos se indique lo contrario.
    • Obtener una parte proporcional del valor de la empresa, en el caso de que si se vende, venda la empresa o se disuelva.
  • Derechos políticos o de gestión.
    • Derecho al voto en la junta general, donde se realiza la toma de decisiones clave para la empresa.
    • Acceso a la información de la empresa para conocer su situación financiera, legal y estratégica.
    • Participar en la elección y cese de los administradores.

Además, la cantidad de acciones que posea un accionista determina cuál es su peso en las decisiones: más acciones, más votos que podrá ejercer y mayor será su influencia en la administración y las decisiones.

Visita Billin, el programa de facturación gratis.

Obligaciones del accionista

Además de derechos, el accionista también tiene obligaciones que están contempladas a lo largo de toda la Ley de Sociedades de Capital.

Generalmente, este tipo de obligaciones están recogidas en los estatutos para que puedan ser revisadas por las personas de forma pública en el Registro Mercantil.

Estas obligaciones son:

  • Aportación del capital comprometido cuando se suscriben las acciones (art. 58 y ss., 78 y ss., 81 y ss., 85 y ss.).
  • Cumplir con las prestaciones accesorias, si las hubiera (art. 86 y siguientes de la LSC).

Estas obligaciones pueden ser de:

    • Hacer por parte de los accionistas, como prestar servicios.
    • No hacer, por ejemplo, no competir con la empresa.

Estas prestaciones no pueden integrar el capital social.

  • Respetar los estatutos de la sociedad, que pueden establecer normas internas específicas para los accionistas, limitaciones, compromisos o condiciones particulares.
  • No perjudicar los intereses de la sociedad, con lo que los accionistas deberán actuar siempre con lealtad y en beneficio común, sobre todo si se participa en la gestión o se tiene información relevante.
  • Responder por el capital no desembolsado, en caso de que las acciones no hayan sido pagadas en su totalidad cuando se suscriben. Esto es posible en sociedades anónimas.

¿Cuál es la diferencia entre socio y accionista?

Habitualmente, se suelen utilizar los términos socio y accionista como si fueran lo mismo. Sin embargo, aunque están relacionados, no significan exactamente lo mismo, ya que va a depender del tipo de sociedad del que se trate.

  • Un accionista es un socio que participa en una sociedad anónima (S.A.), ya que el capital social está dividido en acciones.
  • Ser socio es algo más amplio porque puede participar en distintos tipos de sociedades, como una sociedad limitada (S.L.), una cooperativa o una sociedad civil, donde el capital no se divide en acciones, sino en participaciones u otras formas de aportación.

En la siguiente tabla lo podemos ver más claro:

Concepto Accionista Socio
Tipo de sociedad Sociedad Anónima (S.A.) S.L., S.A., cooperativa, sociedad civil, etc.
Forma de capital Acciones Participaciones, aportaciones u otras formas.
¿Cotiza en bolsa? Puede ser (si es una S.A. cotizada) No necesariamente.
Transmisión Más libre (acciones) Limitada (participaciones sociales)

No te pierdas nada

Subscríbete a la Newsletter de Billin

A principios de cada mes enviamos un email
con todas las novedades.